Enrique Mario Francini
Enrique Francini en 1946, un año después de la formación de la orquesta que codirigía con Armando Pontier. De der. a izq. (de pie) Alberto Podestá, Raúl Berón, Pedro Sarmiento, Francini, Aquiles Aguilar, Mario Lalli y Rafaelito Del Bagno (contrabajo); (sentados) Adriano Fanelli, Nicolás Paracino, Pontier, Ángel Domínguez, Juan José Paz (piano).
De izq. a der.: José María Suñé, Mauri Rubinstein, Enrique Santos Discépolo, RicardoRuiz, José Basso, Enrique Francini, Ortega del Cerro y Armando Pontier, 1948.
Enrique con la primera integración del Quinteto Real. De izquierda a derecha, arriba, Ubaldo de Lio y Rafael Ferro; abajo: Francini, Horacio Salgán y Pedro Laurenz (1960).
La orquesta Francini-Pontier reconstituida para su gira por Japón. Con los directores, la can-tante Alba Solís y los músicos Normando Lazara,Ornar Murtagh, Quique Lanoo, Romano Di Paolo,Néstor Marconi, Nicolás Paracino y Ornar Valente
Enrique Francini en 1946, un año después de la formación de la orquesta que codirigía con Armando Pontier. De der. a izq. (de pie) Alberto Podestá, Raúl Berón, Pedro Sarmiento, Francini, Aquiles Aguilar, Mario Lalli y Rafaelito Del Bagno (contrabajo); (sentados) Adriano Fanelli, Nicolás Paracino, Pontier, Ángel Domínguez, Juan José Paz (piano).
FRANCINI, Enrique Mario.14 de enero de 1916 - 27 de agosto de 1978) Músico. Violinista. Director. Compositor. Personalidad: Su nombre ha estado invariablemente asociado a iniciativas de importancia en los treinta y cinco años más recientes, especialmente como parte del movimiento renovador que encabezaron Galván, Piazzolla, Troilo y Salgán y en el que alternó lucidamente como ejecutante, como director y como compositor. Número uno, juntamente con Simón Bajour, entre los cultores del virtuosismo violinístico en el tango, surgió al plano profesional entre los valores más auténticos de la Generación del Cuarenta. Inspiró las bases de su modalidad en las formas interpretativas creadas por Argentino Galván —arreglador— y Raúl Kaplún, ejecutante éste de la promoción anterior a la suya, y cuyo lugar tomó en la orquesta de Miguel Caló. Paulatinamente, luego fue encontrando el definido camino de su
Enrique Francini con Ubaldo de Lío cuando integraban el Quinteto Real.
propio estilo. Violín de llamativa seguridad, vibrato medio, depurado e inconfundible sonido y prodigiosa mano izquierda, se ha caracterizado además por una muy personal manera de dividir la frase musical. En ciertos casos su dominio del instrumento lo ha volcado al efectismo en algunas cadencias de artificioso desarrollo. Aunque lo capital de su labor artística ha trascendido esa limitación expresiva merced a su natural aptitud para "cantar y decir" un tema, especialmente en los arreglos de Piazzolla y de Galván, alternando las sonoridades apagadas y melancólicas de unos pasajes con la brillantez y la exaltación romántica de otros. De las numerosas intervenciones bien representativas de su estilo, deben ser recordadas las que alcanzó en los tangos Mañana iré temprano y Sans Souci, con la orquesta de Miguel Caló (discos Odeón); Delirio, Pecado y A los amigos; con la orquesta de Francini-Pontier (disco Víctor); Mi refugio, Tema otoñal y Marrón y azul, con el Octeto Buenos Aires (discos Allegro y Disc-Jockey); Milonguita, Copacabana y Tiernamente, con Los Astros del Tango (discos Music-Hall) Organito de la tarde, El arranque y Ya no cantas chingolo, con el Quinteto Real (discos Columbia). La influencia de su modalidad se ha evidenciado especialmente en algunos jóvenes arcos de la hornada siguiente, como Fernando Suárez Paz.
Enrique Francini: La orquesta Francini-Pontier reconstituida para su gira por Japón. Con los directores, la cantante Alba Solís y los músicos Normando Lazara,Ornar Murtagh, Quique Lanoo, Romano Di Paolo,Néstor Marconi, Nicolás Paracino y Ornar Valente-1973
Fue director, durante diez años, juntamente con el bandoneonista Armando Pontier, de una orquesta de verdadera significación, muchas de cuyas realizaciones —Arrabal, A los amigos, La beba, Lo que vendrá, Pa'que se acuerden de mí, Para lucirse, Pichuco, Tigre viejo, A Zárate— configuraron verdaderas muestras de tango instrumentalmente evolucionado. Sobre la misma base de inspiración troiliana, aunque superándose en la jerarquía sonora, en la interpretación y en el arreglo, condujo luego un conjunto, como director independiente, con realizaciones tan logradas como El resero, La trilla, Petit salón, Elegante papirusa y Barranca abajo. Su imaginación musical para la composición quedó expresada en sus tangos, preferentemente melódicos por su temperamento, como Mañana iré temprano, Junto a tu corazón, Inquietud y Ese muchacho Troilo, entre los cantables y Tema otoñal, entre los orquestales de corte moderno. .¡
Enrique Mario Francini y Armando Pontier
Vida: Nació en la localidad de San Fernando, provincia de Buenos Aires, el 14 de enero de 1916. Siendo todavía adolescente, ya con su vocación perfectamente perfilada, se radicó en Campana, donde juntamente con Héctor Stamponi, hizo sus primera armas de ejecutante. En 1935 integró la orquesta de Juan Elhert, en la cual Armando Pontier tocaba el bandoneón y con la que llegó a Buenos Aires, en 1937, para
Enrique FranciniDe izq. a der.: José María Suñé, Mauri Rubinstein, Enrique Santos Discépolo, RicardoRuiz, José Basso, Enrique Francini, Ortega del Cerro y Armando Pontier, 1948.
actuar en Las Matinées de Juan Manuel, por Radio Prieto. Al año siguiente, por Stentor esta vez, prestó su concurso al conjunto de Argentino Galván. Ese mismo año fue requerido por Miguel Caló, compartiendo con Lázzari, Berón, Pontier, Podestá, Maderna, Domingo Federico y otros destacados elementos de su misma generación hasta 1945. Formó por aquella época, con músicos de jerarquía, su propia orquesta, que encabezó con Pontier, correspondiéndole inaugurar con ella el palco del Tango Bar, de la calle Corrientes, participando asimismo en el rodaje de la película Cuidado con las Imitaciones. Desde Margo y Sirva otra copa (1946), grabaron todas sus versiones para la casa Víctor, con los vocalistas Alberto Podestá, Raúl Berón, Roberto Rufino, Julio Sosa, Pablo Moreno, Roberto Florio, Héctor Montes y Luis Correa, registrando en total ciento veinte placas, treinta y cuatro instrumentales y
Enirque FranciniEnrique con la primera integración del Quinteto Real. De izquierda a derecha, arriba, Ubaldo de Lio y Rafael Ferro; abajo: Francini, Horacio Salgán y Pedro Laurenz (1960).
el resto con canto. En 1955, continuó su labor por propia cuenta, con Juan José Paz como pianista, Julio Ahumada —primer bandoneón—y Alberto Podestá, Roberto Rufino, Julia Vidal y otros en vocales, grabando también para Víctor hasta la disolución de la orquesta tres años después. Desde 1950 en adelante, simultáneamente con su tarea de director, formó parte de varios conjuntos de instrumentación reducida: desde 1952, en dúo de piano y violín con Héctor Stamponi, con quien grabó temas como Nostalgias y Griseta, para la Víctor; en 1954, en un homenaje a la memoria de Juan Carlos Cobián, en un quinteto de primeras figuras con Aníbal Troilo (bandoneón), Roberto Grela (guitarra), Kicho Díaz (bajo) y Horacio Salgán (piano); a partir de 1955 y hasta 1958, en todas las presentaciones del Octeto Buenos Aires —radio, recitales, discos Allegro y Disc-Jockey— en el que ofreció una formi-dable confrontación de modalidades violinísticas con Hugo Baralis; en 1959, grabando para Music-Hall y actuando por Radio Belgrano, formó el septimino Los Astros del Tango, a la vez que encabezaba con Stamponi la orquesta de cuerdas Los Violines de Oro del Tango, de profusa labor fonográfica en Philips. En carácter de primera figura se desempeñó en las agrupaciones de Astor Piazzolla, Atilio Stampone, Aníbal Troilo y Horacio Salgán, aunque su actuación estuvo asociada desde 1960 al Quinteto Real. Realizó, con él, las giras a Japón en 1964, 66 y 69, grabación de discos en Columbia y en Philips y presentaciones en Caño 14 y confitería Relieve, Radio El Mundo y Teatro de Buenos Aires; Radio Carve y confiterías de Montevideo. Volvió a Japón con Pontier en 1973, y con su orquesta en 1977.
Enrique FranciniLa orquesta Francini-Pontier reconstituida para su gira por Japón. Con los directores, la can-tante Alba Solís y los músicos Normando Lazara,Ornar Murtagh, Quique Lanoo, Romano Di Paolo,Néstor Marconi, Nicolás Paracino y Ornar Valente
Ha estado también activamente vinculado a las actividades societarias y gremiales de SADAIC. Además de los ya mencionados, compuso los tangos óyeme, La canción Inolvidable, Triste flor de fango, Princesa del fango, Me Jo dice el corazón, Camuflaye y la fantasía Delirio. Falleció en Buenos Aires.
Por Horacio Ferrer
Editado y compaginado para la web por El tango y sus invitados