lunes, 8 de febrero de 2016

Vocalista en el tango Semblanza


VOCALISTA. Solista vocal de la orquesta típica.
Su advenimiento, de manera incipiente, tuvo lugar con la propia consagración del repertorio de tangos para cantar sobre los escenarios del saínete entre 1915 y 1920 —actores y actrices que cantaban las composiciones de turno, secundados por conjuntos como los de Firpo, Scatasso, De- ambroggio y Maglio, o por las pequeñas agrupaciones propias de cada sala teatral.


Su primera manifestación estable fue la inclusión de Roberto Díaz en la orquesta de Francisco Canaro en 1924. Posteriormente su presencia fue generalizándose en la labor precursora de Antonio Rodríguez Lesende. Ernesto Fama, Luis Díaz, Santiago Devin, Carlos Várela, Teófilo Ibáñez, Carlos Dante, Alfredo Marino, Francisco Fiorentino, Carlos Lafuente y "Príncipe Azul" en las orquestas de Francisco Lomuto, Carlos Di Sarli, Osvaldo Fresedo, Julio De Caro, Anselmo Aieta, Orquesta típica Victor y Pedro Maffia.

A esos mismos intérpretes vocales llamados entonces "chan sonniers" —con la designación francesa equivalente a "cancionista"— o "estribillistas", en razón de que únicamente cantaban el "estribillo" o segunda parte de cada tango— les correspondió aportar la primera galería de estilos perfectamente orgánica —adaptación del "solo vocal" al arreglo instrumental— se inició con la actuación de Roberto Ray en la orquesta de Osvaldo Fresedo y alcanzó una revolucionaria perfección en el tratamiento dado a la tarea cantable por Aníbal Troilo en torno de 1940.

En otras modalidades tuvieron significativa trascendencia Raúl Berón, Edmundo Rivero —que impuso revolucionariamente las voces de bajos y barítonos en las orquestas—, Alberto Serna, Osear Serpa, Alberto Marino, Juan Carlos Miranda, Osvaldo Cordó, Jorge Casal, Horacio Deval, Ricardo Ruiz, Alberto Podestá, Carlos Roldan, Ángel Vargas, Alberto Moran, Eduardo Adrián, Julio Sosa, Raúl Iriarte, Alberto Castillo, Roberto Goyeneche, Alfredo Bermúdez, Roberto Rufino, Orlando Verri, Roberto Chanel, Floreal Ruiz, Enrique Carbel, Miguel Montero, Agustín Volpe, Juan Carlos Casas, Jorge Duran, Héctor Mauré, Carlos Burgos, Horacio Quintana, Héctor Ortiz, Mario Pomar, etc.

Ya a partir de la década del cuarenta su tarea, dentro de la versión orquestal, se extendió a las dos partes de cada obra, hasta confundirse sin diferenciación su trabajo con el del "cantor solista con acompañamiento orquestal".

La inclusión de dos vocalistas en cada agrupación tuvo lugar desde 1932 en las orquestas de Francisco Lomuto, Roberto Zerrillo, Juan Carlos Cobián, Ciríaco Ortiz, Francisco Canaro, para establecerse, de modo definitivo, en la orquesta de Troilo con la pareja Francisco Fiorentino-Alberto Marino.

En todas las épocas han prevalecido en las orquestas típicas las voces masculinas. Sin embargo, en distintas ocasiones han alternado también las femeninas: Nelly Ornar, Julia Alonso, Mirna Mores, Nina Miranda, Alba Solís, Elba Berón, Chola Bosch, Nilda Marino, Olga del Grossi, Nelly Vázquez, Julia Vidal, Ruth Durante, Blanca Mooney, y desde el 70, Inés Miguens, Sandra De Ángelis, María Graña, etc.
Por Horacio Ferrer
Editado y compaginado para la web por El tango y sus invitados